Materiales necesarios: Bol rojo,
algodón, granulado de cola de conejo, polonesa, agua destilada, pinceles, lana
de acero fina, pan de oro, alcohol, gomalaca y si se quiere bruñir el oro, un
buril de piedra de ágata.
Preparado de la cola de conejo: En
un cuarto de litro de agua destilada poner
diez gramos de cola de conejo y dejar reposar 24 horas para que se sature,
seguidamente calentarlo al baño María hasta disolverlo y dejarlo enfriar (si no
se va a utilizar en el mismo día guardar en la nevera.)
Preparado del bol: Separar una
pequeña parte de cola, que emplearemos después en el proceso del dorado y al resto, añadirle poco a poco el bol, aproximadamente
lo que se correspondería con una cucharada rasa, mezclándola al baño María
hasta obtener una crema homogénea.
Método de aplicación: Sobre una
superficie previamente preparada con gesso* aplicar tres manos de bol tibio con
un pincel de marta, (si al dar la segunda mano se disolviese la primera es
síntoma de que se está aplicando demasiado caliente o bien que al bol le falta
cola, si no corriese bien se le puede añadir un poco de agua destilada) una vez
aplicado y seco pulir con la lana de acero hasta dejar una superficie
perfectamente fina y satinada. Llenar medio vaso con agua destilada unas gotas
de alcohol y caso de ser oro falso añadir una porción del tamaño de una cucharadita
de café de cola de conejo (no es necesario licuarla, se disolverá sola en muy
poco tiempo.) Humedecer con un pincel de pelo fino toda la zona que se prevea
dorar, esto lo impregnara un poco y nos permita luego trabajar con más tiempo,
a continuación empezar a colocar el oro mojando antes una pequeña zona (es
conveniente tener el oro previamente cortado pues el agua es absorbida muy
rápidamente por el bol y sino hay agua no se adhiere).Para coger la hoja de
oro, untarse el antebrazo con un poco de vaselina y rozar la polonesa en él,
coger la hoja y dejar que sea absorbida por el agua, una vez colocado el tramo
presionar suavemente con un algodón para eliminar el aire y dejarlo
perfectamente adaptado, repetir la operación al cabo de cinco minutos (no
frotar mientras no esté seco.) Continuar haciendo tramos con el mismo proceder
hasta terminar todo el dorado y dejar secar unas tres horas.
Si una vez quitadas las virutas
quedase alguna zona sin oro se puede reparar simplemente mojando la zona y
colocando un trozo de oro (debe ser más grande que la zona a reparar) y dándole
un poco de presión con el algodón, es normal que aparezcan grietas, son
características de este tipo de dorado, aunque si se quiere también se pueden
tapar.
Cuando el dorado esté terminado rozarlo con la
lana de acero hasta conseguir el envejecimiento y transparencia deseada. A
continuación limpiar los restos que hayan quedado del pulido y bruñirlo con el
buril realizando una suave presión y pasadas regulares siempre en la misma
dirección. En esté punto el proceso ha terminado solo queda protegerlo con tres
finas manos de gomalaca y patinar si se desea.
* GESSO: Especie de yesos
preparados con blanco España y cola de conejo, es imprescindible que el marco u
objeto a dorar haya sido preparado convenientemente con gesso.
(El gesso sintético para esta
labor no sirve)
NOTA.
Evitar tocar con las manos
desnudas las zonas a dorar.
No utilizar recipientes y pinceles
que puedan tener restos de aguarrás o productos grasos.
Antes de empezar si la superficie
ha sido tocada desengrasarla con un paño humedecido en alcohol.